TEXTO DE SALA
Sensibilidades situadas/ Creadoras al encuentro reúne el hacer de artistas y científicas y nos invita a habitar lo liminal entre sus prácticas. Lo liminal hace referencia a una zona de pasaje, al origen de un territorio ambiguo en el que algo deja de ser lo que era, para potencialmente poder transformarse en otra cosa. Es en esta zona donde las investigadoras escriben textos poéticos, autobiográficos, sensibles y situados. Donde la respuesta a ¿qué hago? deviene en: ¿qué soy?, ¿qué me preocupa?, ¿qué me moviliza?, ¿por qué hago lo que hago?. Y al leerlos nos resuena Haraway y su concepto de conocimiento situado. Son textos que -en la jerga artística- se acercarían más a un statement que a una bio. Bienvenido el encuentro. Habitemos esa zona.
Una creadora, es en cuanto artífice, una persona que realiza una obra científica, literaria o artística. Estas creadoras van al encuentro. Ir al encuentro es poner el cuerpo, supone una actitud particular, un modo de estar y hacer con el otro. Es identificar un lugar de posibilidad e ir hacia él. Es allí, justamente, donde artistas y científicas se reúnen: en el terreno de lo posible, del intercambio, del interés compartido. Un territorio donde se profundiza en el concepto de creatividad como área de encuentro, y se trascienden las posturas dicotómicas. En ese espacio donde se despliegan textos autobiográficos, materiales de laboratorio y se comparten más que datos, experiencias. Un ámbito donde las artistas dejaron sus prácticas habituales, para sumergirse en el mundo de la ciencia, de lo técnico, de los resultados y de las probabilidades. Fueron al encuentro, con sus propias historias personales, sus saberes, su lenguaje. Se movieron dispuestas, como sugeriría Haraway, a complementarse y enriquecerse mutuamente, a encontrar nuevas vías para el conocimiento y la expresión, a pensar-con.
Es así como se construyen las piezas que hoy habitan esta sala: a partir del estar-con, en un compostaje material-semiótico, donde empiezan a crecer esos significantes que las artistas identifican y despliegan para construir sentido.
La propuesta es sólo un comienzo; un empezar a pensar-con entre arte y ciencia. Como en un compost que se alimenta regularmente, hoy reunimos los materiales. Si se lo trabaja con conocimiento y constancia, el resultado podrá ser, con el tiempo, un todo indistinguible. Ese día tendremos un abono interesante, olerá a tierra de bosque, y sabremos que está bien compostado. Ese día tendremos, como sueña Haraway, tierra fértil para crear mundos y modificar la realidad.
Ana Larrere